El próximo 11 de noviembre se conmemora el «Día Internacional de la Mujer y la Niña en la ciencia» y qué mejor manera de celebrarlo para la leonesa Ana Murrieta que hacerlo con la distinción de recibir importante beca a nivel internacional, al lado de profesionistas que se encuentran estudiando en diversas partes del mundo.
«Es un honor ser la primera mexicana en recibir la «Ludo Frevel Scholarship» otorgada por The International Centre for Diffraction Data (ICDD). Esta distinción es derivada de mi trabajo de Maestría en Nanotecnología asesorada por el Dr. Flavio Contreras en el Tecnológico de Monterrey«
Platico con Ana vía telefónica, ella estudia actualmente en Monterrey, Nuevo León la maestría de Nanotecnología, su campo de estudios específico es el de estructuras de materiales magnéticos, y más específicamente estudia la cristalografía la cual es la ciencia que se ocupa de la forma y propiedades de las sustancias cristalinas. Estudia las propiedades de los sólidos cristalinos para poder describir su estructura interna o atómica.
La beca que se le otorga a Ana es muy importante para ella, por la cuestión económica, le permitirá poder desarrollar sus investigaciones más ampliamente, pero la importancia en el ámbito profesional, es que me abre las puertas a otros niveles y con mayor importancia en un país como el nuestro, dónde hasta el momento, ningún mexicano había alcanzado recibir esta beca dedicada a un científico como Ludo Frevel.
La cristalografía es una rama interdisciplinaria de la ciencia que se enseña en los departamentos de física, química, geología, biología molecular, metalurgia y ciencia de los materiales. Para alentar a los estudiantes graduados prometedores a realizar investigaciones orientadas a la cristalografía, el Centro Internacional de Datos de Difracción (ICDD) ha establecido un Fondo de becas de cristalografía, conocido como Fondo de becas de cristalografía Ludo Frevel.
Son estudiantes destacados los que se distinguen al recibir esta beca, con la finalidad de motivarlos a seguir adelante con su trabajo de investigación y preparación y ese orgullo de que por primera vez se reconozca a un mexicano, corresponde a Ana Murrieta, originaria de León.
Le pregunto que le diría a las niñas y a las jóvenes que tienen inclinación por la ciencia pero aún no se deciden a estudiarla » Yo les diría que se atrevan a estudiar la ciencia, que se busquen una buena mentora, una maestra que las haga avanzar. Estoy convencida que la mujer puede lograr lo que se proponga, que aún hay campos un tanto cuanto difíciles pero que si se puede avanzar en la ciencia cuando hay compromiso. Estamos abriendo puertas para la cristalografía en México y para las mujeres en la ciencia. Y demostrando que las mexicanas, sí podemos ser ingenieras y científicas»