Por Héctor Jáuregui Bustamante
Gerente del Laboratorio Moda APIMEX
Tras un periodo de incertidumbre, disminución en el poder adquisitivo y pocas ventas durante el año pasado, las empresas lanzan productos más conservadores, incluso con una esencia de atemporalidad, logrando cumplir con la encomienda de tener productos con una vida útil y funcionalidad más longeva, pero sin dejar de lado el confort al que nos acostumbramos por estar en casa.
Este cierre de 2021, veremos productos que tengan una conexión emocional con el pasado de una manera nostálgica, recordando lo que éramos y el tipo de productos que consumíamos antes de la pandemia, primero de manera natural, es decir, todo lo que es de origen orgánico y/o ecorresponsable. Buscaremos apoyar al comercio local para fortalecer nuestro entorno y ayudar al planeta, productos de líneas simples y tonos neutros que nos hablan de un nuevo minimalismo, sobreposición de capas, líneas envolventes y materiales suaves que envuelvan al cuerpo de manera cómoda y funcional para cumplir con este equilibrio de trabajo y ocio.
Para el mercado festivo recordaremos la elegancia y las siluetas de siglos pasados, pero siempre con un aire moderno y actual, un nuevo renacimiento lleno de brocados y decoraciones llamativas, mangas voluminosas y botines puntales acordonados como si se tratara de un nuevo estilo victoriano. Tonos muy obscuros donde el negro y rojo quemado son protagonistas, arrastrando la esencia del estilo newpunk que está funcionando comercialmente para el mercado joven.
Buscaremos proyectar armonía y felicidad por medio de bloques de colores intensos y siluetas aniñadas con una inspiración de los raves en los años 90, que nos lleven a un nuevo mundo imaginario lleno de fantasía y alegría por medio de las cosas simples.
Finalmente, tendremos conceptos que conectan con el mercado más joven, los nativos digitales, estos consumidores escapan de la realidad y prefieren comunicarse por medio de redes, creando una fantasía en el mundo virtual. Consumen productos de alta tecnología y con una nueva estética hacia la distorsión y asimetría. Productos de protección y sin género, con colorido vibrante mezclado con colores blanqueados buscando proyectar innovación de una manera pacífica.
El consumidor del 2022 buscará productos que tengan armonía en todos los entornos, una vida útil más larga, funcionales para diferentes situaciones de uso y de manera cómoda, empresas que tengan respeto por el planeta y eviten ser contaminantes, con transparencia en sus productos y con aplicación de tecnología para cumplir con lo antes mencionado. Productos que nos digan que todo estará bien y saldremos adelante como comunidad.
